domingo, 20 de diciembre de 2009

Luces evanescentes de Enero.

Esta es una pequeña historia que se me ocurrió una noche, el narrador omnisciente no es el campo en el que me suelo mover, pero para esta vez pensé que le quedaría mejor. Me ha gustado bastante mucho el resultado.


En pleno Enero, las luces de las farolas se le antojaban poco luminosas a Beth en aquella fría y oscura noche.
Caminaba como podía por la acera, con una manta raída por los hombros que le habían dado las monjas, ella que en otro tiempo había sido una gran mujer ahora se veia en tales condiciones.
Las piernas entumecidas por el frió, estaban al borde de la congelación y aun así daba un paso tras otro. Beth sabia a la perfección que si se dejaba caer por el cansancio seria peor.
Esa podía ser su ultima noche, siempre tenia que estar en guardia.
Desde hacia muchos meses, unos meses que se habían convertido en años para la castaña chica, Beth no tenia un lugar en el mundo al que poder considerar hogar.
La historia se remonta al invierno pasado, cuando su único amor la había dejado. Ella creyó que aquello era de verdad, que el por siempre y para siempre no eran solo palabras sin significado. Pero se había equivocado, otra vez.
Lo había dejado todo por el, no penso con la lógica, no pensó en que no estaba bien dejar a la única familia que tenia por un hombre. Había sido tonta y ahora se daba cuenta, cuando no habia marcha atras.
Una mañana la cama estaba vacia y las perchas del armario desnudas.Y el le habia arrebatado la alianza.
La casa se le caia encima, las paredes la ahogaban como si hubiesen sido amaestradas por el.
Y lo que era peor... los pagos se acumulaban en un pozo vació. Tuvo que dejar el que en otro tiempo había sido su nido de amor.
Los meses en la calle pasaban y pasaban, como si nadie se acordara que Beth todavía seguía con vida. Porque respirar, respiraba.
Sus zapatos rotos por todos los lados imaginables la llevaron a una vieja casa de ventanales rotos. Debió vigilar sus pisadas pues le habían llevado a aquel sitio que tanto le había costado dejar y que ahora no podía ni tan siquiera pisar porque dolía demasiado.
La mansión, que en otro tiempo había sido una gran casa, había tomado ahora aspecto de abandono. Los ventanales habían sido rotos, probablemente por niños revoltosos. El enorme jardín de la entrada, siempre cuidado cuando la casa era habitada, ahora estaba lleno de telarañas y malas hierbas, realmente daba pena.
Beth puso un pie en la entrada, consiguiendo con ello un enorme escalofrió y esta vez no era a causa del frió. Sabia que no le hacia ningún bien volver allí, pero la noche era demasiado fría y necesitaba de veras un lugar donde quedarse. La casa por dentro, estaba igual que cuando la había dejado, exceptuando mas polvo que antes.


Para ella alli olia a su vida pasada, puede que se estubiera volviendo loca, pero los armarios todavia tenian sus olores guardados dentro, esperando salir cuando ella los abriera.
Beth miro la cama con ojos resplandecientes, apostaba cualquier cosa que la almohada olía a el, el que no podía nombrar.
Y así era, dejo caer su cabeza en la blanca almohada, que en otro tiempo había sido blanca y un olor a jazmín le hizo cosquillas, su olor seguía enclaustrado allí al igual que su voz en la mente de la castaña.

El sueño vencio, un sueño profundo como hacia meses que no tenia.
Sabia que todo aquello lo pagaría caro al día siguiente, no podía permitirse recordarlo, no podía permitirse olerle y mucho menos imaginarse el tono rasgado de su voz pues la nada en la que se había convertido su pecho dolería mas que nunca.


Pero no se sabe si paso, pues nadie volvió a verla.
No se sabe si esta viva, pero antes tampoco se sabia.
Y la casa se convirtió en aquel caserón de toda ciudad del que se cuentan historias de fantasmas.




4 comentarios:

  1. Eva : como mola la historia! *____*

    felicidades gina!!

    envialo algun sitio! a lo mejor te lo publican!

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  2. *_______*

    Echaba de menos leer algo tuyo (:
    Sabes PERFECTAMENTE que me encanta todo lo que escribes. Y esto es especialmente bonito! Se me encogía el estómago al leerlo.

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  3. O_O Ya sabía yo que eras buena! actualiza a menudo que ya tienes otro seguidor más!

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  4. Gina! Eres una crack!
    Me gusta mucho como escribes, sigue subiendo cosas!*.*

    Soy la Jules! La Jules de...-Alaaaaaa esa es la camiseta de Adventurland?????

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